El sábado 9 de mayo, a las 14:30, en el stand de la editorial Noveduc en la Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, se presentará «Gestión educativa en acción», el libro de Laura Lewin que brinda herramientas para el trabajo de los directivos que buscan desarrollar, motivar y liderar a los educadores de sus instituciones.
En este libro se encuentran ideas, técnicas, ejercicios y estrategias para ayudar a los docentes a trabajar bien, y a los que ya lo hacen, a trabajar mejor aún, de la mano de una de las mejores profesionales de la gestión en el ámbito educativo. Con entrada libre y gratuita, la convocatoria está dirigida a los directivos para repensar su rol en la escuela.
Como dice la autora, en la actualidad es muy común observar a los directivos pasar largas horas en sus oficinas sentados frente a una computadora, participando de extensas reuniones, realizando tareas administrativas o “apagando incendios”, tarea que se ha transformado casi en un hábito. Por esta razón los directivos dedican cada vez menos tiempo a las labores pedagógicas, es decir, a trabajar junto a sus docentes. Si los directivos destinan la mayor parte del día a la resolución de situaciones inesperadas, habría que pensar que algo se está haciendo mal; y que sin duda, se ve reflejado en su gestión.
La idea sería comenzar a trabajar para que el “apagar incendios” sea la excepción y no la regla. Los directivos persiguen la calidad educativa de su institución, que está determinada principalmente por la calidad de sus docentes, por sus aciertos y desaciertos.
Lewin sostiene que una situación que se repite en muchas instituciones educativas es la de tener docentes “amesetados”. Es decir, practicando lo mismo durante años, de la misma manera, y con el mismo nivel o aún con un nivel menor que el que tenían cuando ingresaron a la institución. Con el paso del tiempo, y sin un plan de desarrollo profesional, sin metas ni objetivos, el docente, simplemente, deja de crecer. Todo directivo tendría que proponerse que cada docente que trabaja con él crezca profesionalmente, que pueda sentir orgullo por el desempeño de sus ocupaciones, con capacidad para enfrentar cambios y mejoras y asumir riesgos que repercutan positivamente en su trabajo y, por lo tanto, en la educación de sus alumnos. La labor de un directivo debería ser la de conducir a sus docentes para que logren un alto nivel de satisfacción profesional, de modo de generar una mejor experiencia para los alumnos.
Sobre la autora
Laura Lewin es consultora de las más importantes instituciones educativas de Argentina. Ha dictado talleres en Latinoamérica, Estados Unidos y Europa. Preside el Congreso Internacional de Desarrollo Profesional para Profesores y Coordinadores de inglés, y el Congreso Internacional para Directivos Innovadores de Instituciones Educativas, ambos con sede en Buenos Aires. Dirige ABS International, una empresa de capacitación educativa, desde el año 1992.
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