En el reconocido periódico New York Times, un artículo publicado hace un tiempo se refería a que los candidatos a maestrías podrían ser considerados clientes que toman un servicio en vez de especialistas interesados en la tradicional búsqueda de conocimiento.
Sin embargo, todos reconocemos que la calidad en educación a cualquier nivel depende no solamente de la habilidad e intencionalidad del maestro sino también de la voluntad y capacidad del alumno que aprende. La noción de 'vendedor' y 'cliente' no se aplica al proceso de enseñanza-aprendizaje por cuanto entre vendedor y comprador no existe la estrecha inter-relación que comparten el tutor y el estudiante.
Una vez que se accede a la educación pos-secundaria, el alumno recibe un servicio que generalmente insume un costo a cargo de la empresa, la universidad o el propio alumno.
En la actual capacitación en idiomas, existen numerosas propuestas de entrenamiento que requieren el traslado del estudiante a un centro educativo o la visita de un docente a la empresa. El trato entre la empresa contratante del servicio educativo y la institución que lo provee indudablemente se da en una relación contractual que conlleva un rédito económico para el proveedor. Pero la relación alumno-tutor se aleja de la relación cliente-proveedor en cuanto se establecen vínculos de enseñanza-aprendizaje que comprometen de igual manera a ambas partes. El alumno es un adulto responsable que puede y debe tomar decisiones sobre sus necesidades, objetivos y preferencias y el profesor, en calidad de tutor, ofrece y propone, pero no dispone.
¿Se transforma el alumno que contrata estos servicios así en el cliente de la empresa que ofrece tal servicio? Si bien muchas de las opciones de capacitación individual o en empresas son exitosas, la tecnología de la información y la comunicación permite opciones más novedosas, debido al fácil acceso a la web 2.0. En tanto el alumno logre los resultados previstos trabajando con responsabilidad, manteniendo la interacción constante con su tutor y esforzándose por lograr los objetivos con su guía, continuará siendo 'alumno' en el aspecto académico, aunque los servicios que se le presten aparenten haberlo convertido en cliente.
e-duTraining. El idioma que hablan las empresas
Informes: 0341 558 8500 / http:// www.e-dutraining.com
