Especialistas consideran que a veces, es bueno que los niños y niñas tengan un umbral de aburrimiento para generar la creatividad individual.
Comenzaron dos semanas en donde los chicos y chicas no tendrán tareas ni videollamadas con sus rutinas escolares y en medio de un aislamiento que ya supera los 100 días pueden aparecer momentos en los que no sepan qué hacer.
Es muy habitual que cuando los más pequeños se aburren en casa, los padres dejan para más tarde lo que estan haciendo para tratar de entretenerlos pero, «¿Es esto positivo para ellos?» es la pregunta que muchos especialistas hacen.
En este sentido surgen de investigaciones que tanto los adultos como los niños, prefieren compartir el tiempo libre con amigos o familiares, pero lo cierto es que esto no siempre es posible, y mucho menos en este contexto de pandemia por coronavirus.
Por ello, «desde niños debemos conocer distintos recursos que nos permitan disfrutar de nuestro tiempo libre, conociendo nuestras aficiones y habilidades para desarrollarlas de forma individual», así lo marcan quienes investigan estas actitudes psicosociales.
Lo cierto es que los padres no pueden ser «los payasos» de sus hijos en todo momento para entretenerlos. Por el contrario se debe motivar a los niños y niñas a conocer cuáles son sus aficiones; pero sí ofrecerles recursos para que organicen su tiempo de ocio.
El dejar que los niños se aburran puede ser positivo si sus padres y madres ofrecen distintas opciones para que ellos decidan qué hacer y así acompañar su desarrollo creativo.
ESTAR PREPARADOS PARA SU CREATIVIDAD
Es conveniente que padres y madres cuenten con algunas opciones para poder ofrecerles. La idea no es decirles lo que tienen que hacer para entretenerse, sino hacer que ellos sean capaces de elegir.
Los libros, películas, juguetes, juegos de mesa, tablet, video juegos, la tele o la compu, son los recursos más utilizados por los niños. En muchas ocasiones, esto resulta insuficiente para que se entretengan, especialmente en períodos en los que su tiempo libre es muy amplio, como en este contexto.
Con el fin de ampliar sus recursos y hacer que su aburrimiento se vea reducido sería positivo que junto a ellos se elaboren una lista de posibles actividades que puedan realizar ellos solos en la casa.
Dependiendo de la edad del niño se pueden adaptar algunas de estas propuestas teniendo en cuenta sus capacidades y habilidades.
Por ejemplo, una caja de ropa vieja para disfrazarse y representar algún cuento, material de reciclaje y papelería para decorar su habitación o realizar sencillas recetas de cocina pueden ser algunas de las actividades que pueden surgir.
