Con su aprobación el pasado 28 de octubre, la Cámara de Senadores convirtió en ley la reforma de la Ley de Educación Superior sancionada en 1995. La iniciativa de la diputada nacional Adriana Puiggrós (Frente para la Victoria) ya contaba con media sanción de la Cámara Baja desde mayo de 2013 .
En lo que respecta a la Universidad Nacional de Rosario, ya en el año 1998 haciendo uso de su autonomía, incorporó en el artículo Nº 1 de su estatuto la gratuidad de todas las carreras de grado: «La enseñanza de grado en la Universidad Nacional de Rosario es gratuita, todo ciudadano que haya concluido el ciclo anterior de enseñanza previsto en el sistema educativo nacional o similar, tiene el derecho de ingresar a la misma», declara la universidad en su estatuto.
Con esta modificación se asegura el financiamiento de las casas de altos estudios, así como también de los institutos de formación superior de gestión estatal y de las universidades provinciales.
La ley garantiza el ingreso irrestricto para todos aquellos estudiantes que hayan finalizado los estudios secundarios y promueve el ingreso para los mayores de 25 que puedan demostrar las aptitudes necesarias para la carrera que eligieron. Además promueve políticas de inclusión educativa que reconozcan las diferentes identidades de género y culturas, y generen una integración regional.
Las modificaciones responden así a algunas de las críticas más fuertes contra la Ley de Educación Superior formuladas por estudiantes, docentes y hasta las propias instituciones educativas.
Imagen: Archivo de imágenes
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