El Polo Tecnológico Rosario es un espacio que nuclea a más de 80 empresas del sector tecnológico (software, biotecnología, telecomunicaciones, entre otras), el Estado provincial y municipal, y el sector científico a través de la Universidad Nacional de Rosario y la Universidad Tecnológica Nacional Facultad Regional Rosario. Su potencialidad radica en ser un punto clave donde convergen la formación de profesionales, por medio de su Centro de Formación de Capital Humano, y el networking, a través de diferentes propuestas novedosas de trabajo colaborativo, en un entorno multidisciplinar.
El Centro comenzó en 2011 con el programa “Empleartec”, dirigido por el Ministerio de Trabajo de la Nación junto con la Cámara de Empresas de Software (CESSI). “Lo que hace el programa es donar equipamiento tecnológico a diferentes entidades educativas y financiar determinada cantidad de cursos para que se realicen en los espacios. De ese modo, podemos brindar muchas capacitaciones sin costo, aunque no todas”, cuenta Fabián Longhitano, director de Formación, Calidad e Innovación del Polo y agrega: “En ese momento notamos que había una demanda muy alta de parte de las empresas de Rosario para contratar desarrolladores de software, que supieran los lenguajes de programación Java y .net. Entonces, con la llegada de las computadoras, armamos lo que se llama el Centro de Formación de Capital Humano y creamos un programa con varias empresas pertenecientes al Polo sobre los contenidos que debían tener las capacitaciones para responder a esa demanda”. Y continúa: “Nuestro objetivo es que los jóvenes puedan aprender a usar las tecnologías más demandadas en el mercado actualmente. Estamos atentos constantemente a las tendencias en otros lugares del mundo”.
El Centro de Formación tiene como objetivo cubrir la demanda de personal capacitado en nuevas tecnologías por medio de cursos intensivos de lenguajes de programación, desarrollo web, programación orientada a objetos, videojuegos, desarrollo de aplicaciones web y móvil. Las capacitaciones apuntan a formar a jóvenes profesionales, para que de esta forma puedan acceder de manera rápida y efectiva al mercado laboral, llenando vacíos educativos que muchas veces el sistema educativo formal no puede cubrir. “Las universidades no enseñan a programar específicamente, entonces por medio de los cursos ofrecemos ese complemento de formación. Los cursos que brindamos están orientados a la inserción laboral y a la práctica de la profesión. Los docentes que lo dictan son arquitectos o programadores de software que trabajan y saben mucho del tema; no son cursos teóricos”, explica el director.
Actualmente se dictan cursos de Angularjs, Node.Js, Java, .Net, Android, HTML5, Arduino, entre otros, y los mismos están avalados por la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de Rosario.
A su vez, el Centro realiza actividades conjuntas con otras organizaciones y comunidades como Arbusta, Rosario Game Devs (comunidad de desarrolladores de videojuegos) y PMIBA Comunidad Rosario. En este momento están realizando el curso gratuito de Testing de Software, dictado por Arbusta, y a partir de abril comenzarán la Game Work Jam por tercer año consecutivo en conjunto con la Rosario Games Devs.
Otro punto a destacar es que el Centro posibilita vinculaciones entre instituciones educativas y empresas, por medio de pasantías, para que los estudiantes realicen una experiencia en el mundo laboral: “El año pasado trabajamos con la escuela Gurruchaga y el Politécnico realizando prácticas profesionalizantes en empresas. Alumnos de la escuela tuvieron la posibilidad de realizar pasantías en ámbitos de trabajo. Esa instancia de práctica es fundamental para el desarrollo profesional y humano”.
Además de las capacitaciones y prácticas, se desarrollan actividades no formales que se proponen como espacios de acercamiento entre el sector productivo y quienes comenzarán a dar sus primeros pasos en él; entre la tecnología y la sociedad; entre los emprendedores y los empresarios consolidados y entre personalidades destacadas y el sector interesado en la tecnología y la innovación. Como cuenta el director: “Buscamos generar un espacio para que los chicos puedan venir a vincularse, a adquirir conocimientos, a hacer networking entre ellos. En ese sentido, venimos desarrollando actividades que no tienen costo como el Open Agile, que ya lo realizamos tres veces, del cual participan consultores de Buenos Aires que transmiten su experiencia acerca de metodologías ágiles para desarrollar software”.
“En noviembre del año pasado desarrollamos la primera edición de EmprenDevs, un hackathon para programadores fullstack en Rosario del que participaron 10 equipos. Durante 48 horas, desarrolladores y programadores trabajaron en la creación de una aplicación web o móvil utilizando las últimas tecnologías disponibles como: Anyandgo, Mongo, Express, Famous, Angular.JS, Node.JS, Backbone, ReactJS, Ionic, Auth0, SailsJS. También en enero hicimos, por segundo año consecutivo, la Global Game Jam, una hackaton para desarrollar videojuegos en la cual participaron 95 personas y se presentaron 14 videojuegos. Ahora estamos co-organizando, junto a Hermes Lavallén y su equipo de trabajo, una hackathon de la NASA en Rosario, el Space Apps Challenge, que se va a realizar del 22 al 24 de abril. Es una competencia abierta y gratuita que tiene como objetivo que los participantes puedan presentar soluciones a los desafíos que plantea la NASA. Además, es una oportunidad para que los jóvenes puedan mostrar sus talentos”, explica Fabián.
El director explica que se suman a este tipo de eventos porque buscan promover lo que ellos mismos quieren promover desde el Polo: que la gente participe, que conozca las nuevas tecnologías, que aporte sus ideas y que busque soluciones. “Chicos muy jóvenes, equipos multidisciplinarios que se conocen en el mismo evento y que trabajan todo un fin de semana para crear o diseñar algo, es algo que no se ve en todos lados”, sostiene Fabián y concluye: “Es muy importante para los jóvenes que existan lugares como el Polo, donde puedan reunirse con profesionales con más experiencia y aprender en la práctica, a través del trabajo colaborativo”.
Acerca del Polo Tecnológico
El Polo Tecnológico Rosario (PTR), nació en el año 2000 por iniciativa de un conjunto de actores del sector tecnológico, con el propósito de posicionar a Rosario y su región como un centro de referencia internacional en el desarrollo científico y la innovación tecnológica a través de nuevas formas de gestión que articulen los ámbitos público, privado y científico.
Bajo la figura de asociación civil, el PTR es una experiencia pionera en el país, ya que nuclea más de 80 empresas del sector tecnológico (software, biotecnología, telecomunicaciones, entre otras), el estado provincial y municipal, y el sector científico a través de la Universidad Nacional de Rosario y la Universidad Tecnológica Nacional Facultad Regional Rosario.
A través de sus ejes estratégicos el PTR propone el desarrollo de un modelo basado en la innovación, en el que la producción de alto valor agregado permita generar condiciones de crecimiento sustentable a largo plazo, impulsando el crecimiento de Rosario y su región y permitiendo una mejor inserción en el escenario internacional. Estos ejes son: “Área Tecnológica Nodo Rosario”, “Formación de Capital Humano”, “Promoción de Negocios Público-Privados y Privados–Privados”, “I+D+i” y “Biotecnología”.
Imagen: Polo Tecnológico Rosario
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