Este momento de pandemia por el coronavirus es una oportunidad perfecta para que los más grandes puedan sentarse con sus hijos o hermanos frente al televisor, disfrutar de un momento de diversión al mismo tiempo que aprender y, en el proceso, fortalecer su relación.
Tanto la televisión como las plataformas de streaming se convirtieron en una forma común de entretener a niños y niñas. Es importante que padres y madres identifiquen qué programas ven sus hijos para asegurarse de que incluyen valores y mensajes positivos.
Un programa que realmente valga la pena para los niños debe tener elementos que ayuden a mejorar el desarrollo de los más jóvenes en áreas como la construcción de la autoconfianza, el manejo de situaciones cotidianas, la resolución de problemas con lógica y la ayuda para aceptar las diferencias de las personas.
De esta manera una de las plataformas más populares de contenidos on line como Tubi presenta cuatro títulos divertidos y educativos:
Madeline
Basada en una serie de libros escritos por el ilustrador de cuentos infantiles, Ludwig Bemelmans, esta serie cuenta las aventuras de una niña llamada Madeline. Ambientada en Francia, la protagonista, junto con sus amigas, se enfrentará a situaciones de la vida cotidiana mientras aprende el significado de la responsabilidad, la amistad y la diversidad.
Sabrina la Brujita
Para una chica que descubre que es mitad bruja y mitad mortal, encontrar un sentido de pertenencia se convierte en un asunto complicado. Sabrina encontrará una forma de entenderse a sí misma a través del amor y las enseñanzas de sus tías y otros personajes carismáticos, donde la lección es el valor de la autoestima.
Babar y las Aventuras de Badou
Misterios y enigmas, de estos está repleta la vida del amable Badou ahora que se ha mudado a la casa de su abuelo Babar. No sólo retrata el vínculo familiar entre los personajes principales, sino que también pone a prueba la capacidad de los niños para resolver los diversos rompecabezas a través de diferentes dinámicas interactivas.
Dientes de Lata
Para Sharon Spitz los errores parecen ser una constante en su joven vida. Añade a eso los frenos en sus dientes que la hacen sentir insegura sobre su apariencia. Detrás de toda esta incertidumbre, la serie esconde un mensaje conmovedor de aprender de los errores y la importancia de sentirse bien con uno mismo.
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