Dicho evento se desarrolló en la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA durante sus primeras dos jornadas y concluyó en la Escuela Normal Nº1 de la Ciudad de Buenos Aires.
Organizado por Fundación Sociedades Complejas, auspiciado por Noveduc libros y Eccolequá consultora educativa fue declarado de Interés Cultural y Educativo por la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Asimismo contó con el aval de la Universidad de Buenos Aires, la Dirección General de Cultura y Educación de la Provincia de Buenos Aires, la Organización de Estados Iberoamericanos, la Federación Psicoanalítica de América Latina, entre otros organismos e instituciones nacionales e internacionales que lo declararon de interés educativo o lo auspiciaron.
El acto inaugural dio lugar a las intervenciones de un miembro del Comité de Honor, el prof. Abraham Gak, el presidente del Congreso, Fernando Onetto, la coordinadora general, Andrea Kaplan y la secretaria académica del evento, Yanina Berezán.
En sus palabras de bienvenida, Onetto resaltó que: “Somos escultores de nuestra propia humanidad. Tenemos la arcilla de nuestro lugar social, de nuestra cultura, de nuestra época, de nuestra biografía personal. Nuestro rostro de identidad está situado pero no determinado. La escuela es una institución que sigue ofreciendo recursos para que vayamos esculpiendo nuestro rostro humano a partir de la oportunidad que nos da el reconocer a los otros como iguales, el otro como inspiración de valores. Este Congreso es una oportunidad de seguir humanizándonos, seguir siendo creadores de nosotros mismos porque propone el encuentro de al menos tres diversidades: El encuentro entre académicos y profesionales. El encuentro entre argentinos y extranjeros. El encuentro con el saber, la experiencia y la propuesta del otro”.
Y le propuso al auditorio como meta de trabajo para las tres jornadas: “Acerquémonos a los otros con una curiosidad exploratoria. Emprendamos el viaje al mundo de sus experiencias, con curiosidad, con un prejuicio positivo, con gratitud. Al regalo de sus aportes devolvámosle el regalo de la escucha abierta”.
Por su parte, Kaplan se refirió a uno de los objetivos principales de este evento que fue integrar y visibilizar lo disciplinar con las prácticas concretas de trabajo: “Cuando nos tomamos el tiempo para atender a lo que sí se hace, que es mucho, podemos ver que no faltan acciones en contra de la violencia y a favor de la convivencia. Muchas veces lo que falta es enterarnos, conocer, validar nuestro propio accionar y el de nuestros compañeros en las narraciones de otros, vernos representados.
Este congreso trata de eso: de abrir caminos. De resistir la indicación de mano única. De no silenciar los conflictos, de aprender de ellos, de involucrarnos. Y de practicar la ética”.
La Conferencia magistral de apertura estuvo a cargo de la Dra. Eva Giberti. La coordinadora del Programa Las Víctimas contra las Violencias del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación abordó el tema “Violencias Sexuales contra niñas, niños y trans”. Realizó un recorrido por diversas categorías y conceptos que suelen utilizarse erróneamente o que se prestan a enormes confusiones y destacó la necesidad de que los profesionales que trabajan con niñas, niños y adolescentes se “entrenen” en la atención de esta multiplicidad de violencias.
La segunda jornada también tuvo lugar en el cálido salón de actos de la Facultad de Ciencias Económicas y se desarrollaron con gran intensidad las cuatro actividades plenarias dispuestas para la fecha sobre: problemáticas familiares, criminalización de la infancia y la adolescencia, redes sociales e Internet y bullying.
Además se montaron dos sesiones de “Galería de pósteres” en las cuales colegas de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y Venezuela presentaron proyectos, experiencias e intervenciones posibles para el abordaje de situaciones conflictivas a través prácticas no violentas. Junto con las ponencias orales, se presentaron más de 90 trabajos libres, previamente evaluados por el Comité Académico.
La tercera y última jornada fue sorprendente. La mítica escuela Normal Nº 1 donde tantos educadores han sido formados abrió sus puertas a 26 talleres y grupos de discusión a cargo de profesionales de distintos puntos de Argentina y Latinoamérica. Más de 60 ponencias orales fueron expuestas en 16 mesas de intercambio. El debate al interior de cada espacio fue tan prolífico como las preguntas y comentarios que se sucedieron en cada actividad plenaria el día anterior.
A modo de cierre, los jóvenes artistas del Club de la Pelea propusieron su dispositivo lúdico-artístico a los participantes como una forma de transitar los vínculos en la sociedad de una manera pacífica y diferente.
Informes: www.sociedadescomplejas.org
Imagen: Archivo de imágenes.
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