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«Mariposa blanca», una invitación a jugar con las palabras

La Licenciada en Fonoaudiología por la UNR y creadora de la cuenta @mamayfono.ok, María Fernanda Gómez de la Cruz, presenta su primer material para disfrutar tanto en casa como en consultorios y escuelas.

Por Vicky Rotemberg

El vínculo con las palabras es tan grande como mágico. Las interacciones tempranas garantizan un alojamiento seguro para las infancias, con adultos y adultas dispuestas a estar y ayudar a descubrir. Desde una «Crianza en Comunicación», María Fernanda Gómez de la Cruz atraviesa el muro de su propio consultorio como Licenciada en Fonoaudiología y se dispone a crear contenidos sumamente ricos para acompañar a familias desde su cuenta de Instagram, @mamayfono.ok, que cuenta con más de 55 mil seguidores.

Esta vez, la apuesta se redobla. Así como se doblan y redoblan las palabras para ser transformadas y modeladas. «Mariposa blanca» (Pupek, 2023) está a punto de llegar volando a cada infancia, a cada familia, a cada consultorio, escuela, y lugar donde haya espacio para el juego y la diversión.

La magia de las palabras

«En el consultorio juego mucho con canciones y libros y voy después reinventando cosas. Se puede hacer una canción, o un pequeño título, pero las palabras están ahí para ser abrazadas y resignificadas«, le contó la autora a Aptus.

Sobre su vínculo con la escritura, profundizó: «Yo siempre escribo. Escribo para mí, en el consultorio estoy siempre escribiendo cosas porque surgen espontáneamente en el juego, sin pensarlo. En ese encuentro tan singular con el niño, surgen. A algunas las grabo como notas de voz para que me queden. A veces, cuando no me puedo dormir, escribo también».

Si bien no se define como escritora, sino como una ávida lectora, recuerda su vínculo con los libros y las palabras desde su más temprana infancia. «Siempre hubo libros. Para mis viejos, ir a la librería era una salida, y es algo que hoy sigue en mi casa», subrayó. Además, es hermana de la poeta Mercedes Gómez de la Cruz, a quien acompañó en distintas presentaciones y lecturas nutriendo su adolescencia. «Siempre fui abrazada por la literatura y la poesía», resaltó.

María Fernanda Gómez de la Cruz, autora de «Mariposa Blanca» (Gentileza, Instagram @pupek.editorial)

Con su amor por la comunicación y el compartir, hace unos años creó la cuenta @mamayfono.ok, con la finalidad de resaltar la importancia de la comunicación en los primeros años de vida. «Busco transmitir lo imprescindible que es entender la interacción verbal para la construcción del lenguaje, con un adulto disponible, con las palabras que nos dan la posibilidad de modificarse», reflexionó.

Y añadió: «Las palabras tienen una cosa muy mágica y es que nosotros las podemos hacer largas, cortitas, gordas, finitas. Las podemos partir, unirlas y crear nuevos sentidos. Y cuando nos acostumbramos a jugar con las palabras, nos damos cuenta de toda su potencia y lo que mueve en los niños, la gracia que les produce jugar con las intensidades. Cuando nos damos cuenta de ese impacto, nuestro modo de relacionarnos con los niños cambia».

El nacimiento de un libro

La cotidianidad de María Fernanda en su trabajo, estudio y la crianza de su hijo e hija, incluye rimas, canciones y cuentos que «están siempre ahí, al pie del cañón, como una posibilidad de encuentro». En ese hacer, las palabras aparecen, se entraman, construyen y van alojándose.

«Una noche aparecieron algunas rimas y decidí que las podía compartir con otros niños y niñas, pero que en ese momento estaban durmiendo. Fui desplegando esas rimas y se las compartí luego a Daniela de Pupet, con quien venía en conversación por otro proyecto. Cuando las leyó me dijo ‘qué hermoso eso que escribiste, vamos a hacer un libro'». Así apareció luego Magalí Mansilla, la ilustradora, quien supo darle color y movimiento a la palabras.

Mariposa Blanca

«Es la historia de algunos pequeños seres que pueden estar en casa, incluso en la puerta de nuestra casa en un barrio. Hay un personaje que vive un poquito más lejos, que tiene que ver con anhelos propios», contó la autora.

Y agregó: «Tiene mucho de infancia. Cuando yo era chica jugaba mucho con los bichos de mi jardín. Y también tiene mucho de mi vida adulta, porque las mariposas tienen para mí un significado muy especial. Siempre que veo una, algo se mueve. Dani propuso el título y enseguida dije que sí». El material es un libro de rimas con formato acordeón, es decir, es un libro desplegable, e incluye un QR para escuchar en formato audiolibro.

Y ahora… ¡a volar!

«Me gustaría que este libro llegue a todas las familias que se pueda. También, por supuesto, a colegas y personas que trabajen con infancias y tengan ganas de jugar con las palabras, construir tramas con el otro a través de ellas. Que llegue volando a todas las casas«, expresó con anhelo.

Las palabras, la literatura, la palabra literaria siempre abre posibilidades. Desde lo lúdico hasta ir desplegando en los planos de lo simbólico. Se trata de habilitarse a tomar las palabras, jugar con ellas, hacerlas más largas o más cortas, dibujarlas o redibujarlas, y todo lo que se ocurra. Así llega esta mariposa, para posarse de a ratitos y luego volar creando y recreando.

El material se encuentra en preventa a través del siguiente enlace.