“La cuentería de Tato Güemes” es un proyecto educativo que impulsa la Escuela Primaria 1249 “Gral. Martín M. de Güemes” de Cañada de Gómez y que ya incorporó a más escuelas primarias de la ciudad, como ejemplo de integración de múltiples lenguajes, múltiples actores y en espacios que van más allá del aula, como los hogares de cada estudiante.
La idea comenzó a implementarse en abril de 2014, a raíz de una iniciativa de Tato Garabato, músico conocido por ese seudónimo, que se dedicó a la docencia hasta tener que jubilarse por razones de salud, pero que aún desde su casa, continúa creando espacios para compartir con colegas y estudiantes, y seguir enseñando.
La propuesta consiste en que Tato escribe un cuento, lo lee por la radio, enriqueciéndolo con el lenguaje radiofónico -música y efectos especiales- y los alumnos lo escuchan en su salón de clases. A partir de entonces, se despliegan varias actividades para el aula, en el área de Lengua y en varios aspectos más.
“Hoy en día participan muchas más personas, por ejemplo la bibliotecaria de la escuela, que escribe cuentos infantiles. Además, agregamos condimentos que enriquecen el proyecto, como que los chicos voten el orden de lectura de los textos que quieren escuchar”, cuenta Clarisa Navarro, vicedirectora de la Escuela Primaria Nº 1249 “Gral. Martín de Güemes”.
Las docentes y la bibliotecaria seleccionaron los cuentos, colocaron sus portadas en un afiche y luego, a partir de esa imagen, los niños eligieron, escribiendo el nombre del cuento que les gustaba en un papelito que luego introducían en una urna. Frente a ellos se hizo el recuento de votos y tuvieron que esperar que cada grado terminara de votar.
“Generó mucha alegría y entusiasmo en los votantes; enseguida se armaban las hinchadas para uno u otro cuento. La votación se realizó sobre textos inéditos escritos por la bibliotecaria, a pedido de las docentes, así que es un proyecto que desata ‘creatividad en masa’”, definió la vicedirectora.
La actividad se realiza cada quince días en la escuela, pero además la radio repite el cuento fuera del horario de clases para que los chicos lo puedan escuchar en familia. Navarro sostiene que al principio no fue fácil que los padres sintonicen la emisora a la hora indicada, pero con el paso del tiempo se logró que se involucren.
“A pesar de que la mayoría de las familias de los alumnos provienen de clase obrera o son pequeños comerciantes, vimos que tienen los elementos tecnológicos para poder realizar la tarea. Todos disponen de una computadora, radio o celular que les permite escuchar el programa”, afirmó Navarro.
Cuando comenzó el proyecto, eran muy pocos los chicos que al otro día habían escuchado el cuento en sus casas. Desde la dirección de la escuela enviamos notas personalizadas a cada uno de los padres, incentivándolos a que realicen la actividad. En la actualidad, el proyecto ha tomado tanta relevancia que generó el interés de otras escuelas.
Algunos de los textos trabajados fueron «Historia de una princesa» de María Elena Walsh y adaptado por Tato Garabato, «Niños, las brujas no existen» de María Inés Falconi y » Frente al Cabildo», de Pablo Levín, entre otros.
FM Diapasónica, la radio que nuclear a las escuelas y las familias en torno a esta actividad, no persigue un fin comercial. Tato Garabato arrancó con este emprendimiento luego de jubilarse, y de haber recorrido en su ejercicio docente varias escuelas, entre ellas un centro para chicos con discapacidad donde cerraba el año grabando un CD con los padres de los alumnos.
Como músico y luthier, siempre llevó el arte a sus clases y las convirtió en espacios abiertos, para las familias y la comunidad. Hoy en día, la radio repite los cuentos también los sábados y domingos. Los chicos graban mensajes de audio a través de la aplicación para celulares “Whats app” en clase y se lo envían a Tato, quien los edita y los pasa en las otras emisiones para que lo puedan escuchar en familia.
Fuente: santafe.gov.ar Imagen: patyrimas.lt
