A partir de marzo de 2022 y en formato virtual, profesionales universitarios de distintas ramas podrán acceder a la formación.
La discapacidad como tal presenta una necesidad de abordajes integrales que requieren de información y formación necesaria para proceder, habilitar y crear herramientas desde las distintas disciplinas que allí tienen incidencia.
Lejos quedó la sola intervención de la Medicina o la Psicología. Educación, Derecho, Trabajo Social, Economía, Gestión, Arquitectura -por la accesibilidad universal-, Ingeniería, Tecnología -con sus grandes avances para este colectivo-, Políticas Públicas y Planificación Estatal, también deben contar con herramientas para llevar adelante su trabajo cotidiano en donde la discapacidad también convive.
Por tal motivo, desde la Universidad del Gran Rosario comenzarán a dictar la Maestría en Política y Gestión de la Discapacidad e Inclusión Social a partir de marzo de 2022, en formato virtual, con la intención de formar a profesionales universitarios de distintas disciplinas tanto de la ciudad como del país y toda Latinoamérica. Las inscripciones estarán disponibles a la brevedad en ugr.edu.ar.
En diálogo con Rosario3, el Dr. José Luis Aguirre, su director, destacó: “En la UGR tenemos una tradición importante en el trabajo de formación para la atención integral de personas con discapacidad. Contamos con carreras del campo de la rehabilitación, la salud y la educación. A partir de estas experiencias previas y el compartir entre compañeros y compañeras docentes e investigadores, se concluyó que se debía crear una carrera de posgrado enfocada a la Gestión y Políticas de discapacidad”.
De esta manera, y con un campo de vacancia académica tanto en Argentina como en Latinoamérica, se presentó el proyecto que hace tres meses aprobó -con muy buena calificación- la Comisión Nacional de Evaluación y Acreditación Universitaria (CONEAU).
Leyes que amparan
La Convención de Derechos Humanos para la Discapacidad, que se volvió Ley Constitucional en Argentina en 2010, junto con la Ley de Salud Mental y Ley de Discapacidad conforman un tríptico que obliga a informarse y formarse con una mirada enriquecida a partir de la interdisciplina.
En tal sentido, la ampliación de derechos para este colectivo no cuenta muchas veces con el acompañamiento de la formación profesional de quienes tienen que realizar algún tipo de abordaje. “No saber y comprender estas cuestiones, hace que no se respeten modificaciones que han sido estructurales en el campo jurídico, y que inciden en los demás”, aseveró Aguirre.
Formarse para transformar
Desde la Maestría se abordará una formación relacionada a la gestión y producción de herramientas para efectores públicos y privados, en la producción de políticas públicas de protección, cuidado y acompañamiento a las problemáticas de discapacidad.
“Cada persona desde la disciplina en la que se desenvuelva, podrá hacer un aporte a un campo que es muy complejo y que es imposible abordar desde un único costado disciplinar”, resaltó el director.
A su vez, y con la tesis que el postítulo requiere para su aprobación, se busca un real cambio tanto en la formación personal del profesional, como también en la repercusión que esos conocimientos puedan tener en sus respectivos lugares de trabajo: “Apuntamos a que se pueda producir una herramienta de intervención o producción de conocimiento local. Es decir, para su propia realidad, su propia institución. Buscamos que cada profesional pueda producir una herramienta eficaz para su trabajo cotidiano, para los desafíos teórico-prácticos con los que se encuentran”.
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