Desde un “currículo azul” en Brasil hasta videojuegos de aprendizaje innovadores, se consolida un enfoque global que pone la educación ambiental en el centro de la acción marina.
🌊 Océano como asignatura obligatoria
Audrey Azoulay, directora general de la UNESCO, resaltó que “para proteger el océano, tenemos que cambiar nuestra relación con él, y ese cambio empieza con la educación”. Actualmente, un centenar de Estados Miembros trabaja para integrar la educación ambiental y oceánica en sus currículos. Ejemplos claros:
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Brasil se ha convertido en el primer país en incluir un programa escolar nacional dedicado a la cultura oceánica, de primaria a secundaria.
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Más de 2.400 escuelas de 48 países participan en la red “Escuelas Azules”, fundada en 2022, que incluye actividades prácticas, proyectos de campo y formación docente.
La UNESCO ha capacitado a unos 350.000 jóvenes y adultos en temas de conservación marina.
🎮 Videojuegos como herramienta educativa
Innovando en pedagogía, la UNESCO presentó Ocean Heroes, una misión educativa integrada a Minecraft, en colaboración con Minecraft Education y la Voice of the Ocean Foundation. Con más de 35 millones de jugadores potenciales, el juego sumerge a los jóvenes en ecosistemas marinos y los desafía con problemas reales como contaminación o especies invasoras. La experiencia busca promover el pensamiento crítico y el conocimiento práctico sobre ciencias oceánicas.
💶 Financiación fortalecida y ciencia aplicada
Se renovaron y expandieron alianzas clave con enfoque educativo:
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SEA BEYOND, programa lanzado en 2019 en colaboración con el Grupo Prada, capacita a estudiantes en 56 países: formó a 34.000 en 2024 y habilitó un centro en Venecia.
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Se creó un fondo inicial de 2 millones de euros para financiar proyectos juveniles; se prevé sumar nuevos socios en 2026.
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El proyecto piloto de ADN ambiental (eDNA), apoyado por la Fundación Minderoo, exploró 21 sitios Patrimonio Mundial, identificando unas 4.500 especies. En la próxima fase, se ampliará a 25 nuevas áreas protegidas, con participación de científicos y escuelas locales.
📈 Contexto más amplio: ciencia, cohesión y urgencia
Estas iniciativas se apoyan en la Década de las Ciencias Oceánicas (2021‑2030). Según otros comunicados de la UNESCO, solo el 21 % de los fondos marinos está mapeado, y menos del 2 % de los presupuestos de investigación nacional se destinan a oceanografía. Por ello se mezcla ciencia cartográfica, protección de áreas (como manglares y arrecifes de coral) y construcción de cultura oceánica.
🧭 Conclusión: la educación como motor de cambio
La UNESCO lanza un mensaje contundente: no basta con crear zonas protegidas y generar datos científicos; es imprescindible educar y concientizar a las nuevas generaciones. Con estrategias que van desde programas escolares nacionales hasta videojuegos y ciencia ciudadana, busca cimentar una cultura oceánica global, inclusiva y sostenible.
La apuesta es clara: un océano vivo por medio de una ciudadanía informada y comprometida. Si los jóvenes aprenden desde la escuela, se juegan y participan, el cambio ecológico deja de ser una aspiración para convertirse en realidad.
🎯 Para profundizar:
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Marco pedagógico de Escuelas Azules (2022)
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Austa Ocean Heroes en Minecraft Education
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Iniciativa SEA BEYOND y centro en Venecia
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Proyecto de ADN ambiental (eDNA) en zonas Patrimonio Mundial