En el norte de la ciudad, las actividades organizadas por el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Malba), Figueroa Alcorta 3415, estarán centradas en el cine y la literatura, con «Clásicos de estreno» nacionales y extranjeros y talleres literarios, más allá de las visitas guiadas por las obras-enjambre del belga Francis Alÿs.
Entre los talleres de verano se destacan «Georges Perec. Prohibido perderse entre las cosas», a cargo de Miguel Vitagliano; y «Fantasmas de Rulfo», que dictará Silvia Hopenhayn, mientras que entre los filmes figuran «No soy Lorena», que recorre el intrincado laberinto de las recaudaciones, y «La calle de los pianistas», sobre la herencia de los pianistas Tiempo-Lechner.
En el Museo Nacional de Bellas Artes, sobre avenida del Libertador 1473, con entrada gratuita se realizan casi todos los días visitas guiadas dedicadas al arte argentino y al impresionismo francés, y el 12 de marzo a las 11 se sumará un paseo para personas ciegas.
Se desarrollan además talleres como el de «Relatos mitológicos en la colección del MNBA» el 13, 20 y 27 de enero y el 17 y 24 de febrero a las 16, y «La otra figuración: una nueva imagen del hombre» el 6 y 27 de febrero y 5 y 12 de marzo, a las 15. En tanto que en marzo los encuentros girarán en torno a Fernando Fader y los relatos bíblicos en la colección.
En el marco del Salón Nacional de Artes Visuales 2015 de Cerámica, Grabado y Textil, el Palais de Glace (Posadas 1725) exhibe las obras ganadoras y la muestra «Retratos recuperados», de Hernán Churba, sobre los nietos restituidos de Abuelas de Plaza de Mayo. Además incorpora a su agenda la proyección, siempre a las 19, de filmes centrados en la temporada estival como «Crónica de un verano», de Jean Rouch y Edgar Morin; «Beach Town», de Erik Hammen y «Tomboy», de Céline Sciamman.
En tanto, el Centro Cultural Recoleta (Junín 1930) despliega hasta el 28 de febrero 15 exposiciones ancladas en diversas exploraciones, como «Agujas» de Arturo Aguiar sobre la interrupción voluntaria del embarazo y «Rompecabezas» de Lena Szankay que reúne fotografías de manifestaciones políticas y cotidianas en la ciudad porteña.
El artista uruguayo Manuel Aguiar expone más de un centenar de óleos y acrílicos en el museo Sívori, en avenida Infanta Isabel 555, frente al Rosedal de Palermo; mientras que el Museo Enrique Larreta ofrece, a 200 y 150 pesos o 120 para estudiantes y jubilados, espectáculos de ópera y teatro en sus jardines, como las propuestas «Espejismo Shinkiro» y «Lorca con aires de flamenco».
En el sur porteño, un regreso a la década del 60 con «La Menesunda» de Marta Minujín, ese hito en la historia del arte argentino que se montó por primera vez en 1965 convirtiéndose -aún hoy- en una inusual propuesta artística, es el plato fuerte del verano en el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires, donde también se exhibe una muestra de Ana Gallardo que explora el paso del tiempo en «Un lugar para vivir cuando seamos viejos».
El museo de avenida San Juan 350 presenta además las muestras «La paradoja en el centro»; «Debates en el centro» y «Sala Dr. Ignacio Pirovano», y del 12 de enero al 14 de febrero los visitantes podrán participar de «una plataforma lúdica para dibujar, crear y construir en torno a las exposiciones», gratuita, con cupos limitados e inscripción previa en cursosmamba@gmail.com.
A unos pasos, en avenida San Juan 328, el Museo de Arte Contemporáneo de Buenos Aires incluye con el valor de la entrada la charla «Punto de encuentro, obsesionados por la geometría» sobre arte y psicoanálisis, el 20 de febrero con inscripción previa al mail educacion@macba.com.ar.
También en el sur, sobre avenida Pedro de Mendoza 1843, el Quinquela Martín abre sus puertas de martes a viernes de 11 a 17.30 con una invitación a recorrer su colorida y figurativa colección y la remodelada sala de mascarones de proa. A metros de ahí, al 1929 de la avenida, Fundación Proa exhibe la primera muestra en Argentina del británico Jeremy Deller, que conforma una panorámica sociopolítica de su país.
En tanto, en sus cuatro pisos de Riobamba 985, la Casa del Bicentenario monta una agenda cinematográfica y una exposición por sala. Se trata de «Evocando Bolivia», un ensayo fotográfico de Laura Crespo; «El gran juego de Leopoldo Marechal», que recorre la vida del escritor; o «Mitos y símbolos del arte de la India» con tapices, pinturas, bronces y esculturas de esa cultura milenaria.
También por el centro de la ciudad, en la Fundación OSDE de Suipacha 658, los amantes del arte pueden visitar hasta el 23 de enero la muestra «La Crítica. Arte y sociedad en un diario argentino. 1913-1941»; la intervención «Ellos adentro esperan la fuga», de Débora Pierpaoli; y la vidriera «Khorwa», de Juan Andrés Videla; y del 25 de febrero al 30 de abril la exposición «Magia negra», de Ramírez-Val&Musso.
A pocas cuadras, el Centro Cultural de España en Buenos Aires presenta hasta el 29 de enero en la sede de Paraná 1159 la muestra «Contextos múltiples»: 86 obras gráficas de la segunda mitad del siglo XX; mientras que el Centro Cultural Borges, Viamonte 525, expone «Pasión e imagen», del icónico reportero gráfico Alberto Korda, y «Nepal, fotografías de su gente, sus valles y senderos de montaña».
A partir de febrero, una buena opción para aquellos que no conocen será visitar el Centro Cultural Kirchner (Sarmiento 151) en el restaurado ex Palacio de Correos, donde se albergan la oficina de Eva Duarte de Perón, dos salas sinfónicas -la famosa Ballena Azul-, y el primer mirador público de la ciudad, además de otro atractivos desplegados en sus 100 mil metros cuadrados de aires neoclásicos.
En el predio de la ex ESMA (avenida Del Libertador 8151), al aire libre y con numerosos espacios culturales, el Centro Cultural de la Memoria Haroldo Conti es una sugerente opción de verano, con la muestra de la joven artista Luciana Lamothe sobre los conceptos de bisagra, elasticidad e inercia; las pinturas de Diego Figueroa y la videoinstalación de Lucas Turturro, además de las intervenciones de Fernando Sucari y Valeria Traversa.
También en el Espacio de Memoria y Derechos Humanos, el Ecunhi ofrece una exquisita agenda de talleres y seminarios con encuentros semanales desde mediados de enero y a precios accesibles de acrobacia, clown, maquillaje teatral, reciclaje de vidrio, fotografía, narrativa, tejido de telar y música. Ahí mismo, el Museo Malvinas es otro imperdible para conocer la trama natural, social y política del sur del hemisferio.
La programación completa de las actividades, en su mayoría con entrada gratuita o a precios accesibles, se encuentra disponible en las páginas.
Fuente: telam.com.ar Imagen: Archivo de imágenes
