Después del Querer, Creer, Crear celebrado en Villa Ocampo, en cuyo marco artistas, artesanos y microemprendedores mostraron lo suyo, la idea de pintar murales en las localidades de la micro región apareció como una oportunidad de expresión colectiva y trabajo común.
Allí fueron entonces Lisandro Urteaga, 42 años, y Giselle Rosso Barrientos, de 27, muralistas y delegados en Santa Fe del Movimiento Internacional Ítalo Grassi. Se trataba de proponer la realización de una obra monumental para retratar una realidad, un sueño, debatir un motivo, contar una historia.
La misma escena, detalles más, detalles menos, se repitió en varios lugares del norte santafesino entre julio y agosto de este año, como una derivación del programa “Querer,Creer, Crear”. El resultado fueron nueve murales ya concluidos en Tacuarendí, Villa Ana, Villa Ocampo, Las Toscas, Villa Guillermina, San Antonio, El Rabón, Florencia y El Sombrerito.
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