The Walt Disney Company es una empresa multinacional de medios de comunicación masivos valuada en 4543 millones de dólares. Es la segunda emisora y compañía de cable del mundo, y es la que ha dado vida a los sueños de millones de niños, formando su infancia y la cultura pop. Es la compañía más famosa de la historia, y comenzó con un sólo hombre: Walt Disney.
Muy pocos han cambiado el mundo en la magnitud en la que Walt Disney lo ha hecho. Es la prueba de que las circunstancias y la educación no determinan en quién te convertís. Sus lecciones de vida son recordatorios para miles de jóvenes emprendedores. Aquí van las 5 más destacadas:
1. Debés ser un vendedor
«Diría que mi problema más grande en la vida…es el dinero. Lleva demasiado dinero hacer estos sueños realidad», decía Disney. Las ventas tienen una mala reputación, pero es la habilidad más importante que podés dominar. Y como bien lo decía Walt Disney, los sueños llevan dinero y el dinero proviene de las ventas. Él creía en sí mismo y en sus sueños y podía convencer a otros para que creyeran en él.
2. El liderazgo es inspiración, innovación y concentración
«Puedes diseñar y crear, y construir el más increíble lugar en el mundo. Pero necesitás personas para hacer de ese sueño una realidad». La clave del liderazgo de Walt Disney era su capacidad de contar historias. Es una cosa decir a los empleados que hagan algo, otra muy distinta es inspirarlos a tomar acción. Walt podía contarles una historia, con gran detalle y darle vida.
Asimismo, tenía la habilidad única de contratar a personas más talentosas que él y lograr centrar y coordinar su atención hacia un objetivo común. Admitió ser un terrible animador, por lo que contrató lo mejor que podía pagar y los centró en innovar la compañía. Conocía a sus empleados, lo que eran capaces de hacer, y no aceptaba nada menos que eso.
3. Debés estar constantemente mejorando
«Cuando sea que me subo a una atracción, siempre pienso en qué será lo que tiene de malo y cómo se puede mejorar». Walt creía en el futuro. Insistía en que Steamboat Willie debía tener el sonido en sincronía y grabado, algo jamás antes visto en una caricatura de la época. Antes de Blanca Nieves, no existía los largometrajes animados. luego de convertirse en un gran éxito y cambiar literalmente la industria del cine, lo llevó a muchos más de los amados clásicos de Disney como Cenicienta, Alicia en el país de las maravillas y Fantasía.
4. Desarrollá una alta tolerancia al riesgo
«Seguimos avanzando, abriendo nuevas puertas, haciendo cosas nuevas, porque somos curiosos y la curiosidad nos continúa llevando por nuevos caminos». Walt tomó muchos riesgos en su carrera. Algunas veces Walt incluso debió hipotecar o vender sus posesiones, y jamás sin pensarlo en profundidad. En 1955, Disneylandia fue la más grande apuesta en la historia de los negocios en Estados Unidos.
5. Cambiá tu actitud hacia el fracaso
«Todas las adversidades en mi vida, los problemas y obstáculos, me han fortalecido… Puede que no lo reconozcas cuando ocurren, pero un puntapié en los dientes puede ser lo mejor para vos». Walt Disney fracasó y mucho. Su primer estudio, Laugh O’ Grams jamás logró generar ganancias. Sin embargo, su más notable fracaso fue Oswald el conejo afortunado. Lo perdió todo, su estudio, equipo de trabajo, animadores y creaciones. Sin embargo, de las cenizas de ese gran fracaso surgió uno de los personajes más queridos: Mickey Mouse.
Si querés conocer el Mundo de Disney y vivir personalmente cada una de estas premisas, una buena idea puede ser consultar un sitio de viajes y sacar tu ticket de vuelo para empezar a poner en práctica cada una de ellas.
Fuente: Lifehack Autor: Universia España Imagen: sohu.com
Comentar